Bien sabemos que los jeans son prendas clásicas para cualquier temporada y, por tanto, unas de las tendencias que más seleccionamos pues nos aseguran siempre ir bien vestidas, no importa la ocasión.
Sin embargo, una prenda tan versátil y llevada necesita ciertas dosis de renovación para seguir en el gusto de quienes los llevan. En este 2018 la clave está en un detalle al que, probablemente, jamás le has prestado nada de atención.
Hablamos de la cremallera o, mejor dicho, de la NO cremallera. Y es que después de muchos, muchísimos vaqueros hemos llegado a la conclusión de que los modelos con cierre de botones quedan MIL veces mejor.
Los detalles marcan la diferencia y en este caso los botones consiguen transformar su estética casual, sacándolo de la ‘normalidad’ y convirtiéndolos así en los jeans perfectos para looks formales y/o de fiesta. Suelen ser siempre de tiro alto por lo que, a diferencia de un clásico vaquero, éstos hacen cinturilla y alargan las piernas. Y por si no fuera suficiente, además, se adaptan y ajustan como si de un guante se tratara.
Sin embargo, una prenda tan versátil y llevada necesita ciertas dosis de renovación para seguir en el gusto de quienes los llevan. En este 2018 la clave está en un detalle al que, probablemente, jamás le has prestado nada de atención.
Hablamos de la cremallera o, mejor dicho, de la NO cremallera. Y es que después de muchos, muchísimos vaqueros hemos llegado a la conclusión de que los modelos con cierre de botones quedan MIL veces mejor.
Los detalles marcan la diferencia y en este caso los botones consiguen transformar su estética casual, sacándolo de la ‘normalidad’ y convirtiéndolos así en los jeans perfectos para looks formales y/o de fiesta. Suelen ser siempre de tiro alto por lo que, a diferencia de un clásico vaquero, éstos hacen cinturilla y alargan las piernas. Y por si no fuera suficiente, además, se adaptan y ajustan como si de un guante se tratara.

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